Demasiadas veces tenemos miedo. Miedo de lo que podríamos no ser capaces de hacer. Miedo de lo que podrían pensar si lo intentamos. Dejamos que nuestros temores se apoderen de nuestras esperanzas. Decimos que no cuando queremos decir sí. Nos callamos cuando queremos gritar y gritamos con todo cuando deberíamos cerrar la boca. ¿Por qué? Después de todo sólo vivimos una vez. No hay tiempo de tener miedo. Entonces BASTA. Hacé algo que nunca hiciste, atrevete. Olvidate de que te están mirando. Intentá la jugada imposible. Corré el riesgo. No te preocupes por ser aceptado. No te conformes con ser uno más. Nada te ata, nadie te obliga. Se vos mismo. No tenés nada que perder y todo, todo, por ganar.

viernes

Hoy no tuve mejor idea que platicar un rato con mi mente. La capa de la vida quiso darme una lección y pretendía que la escuche con total atención ( sabiendo perfectamente que eso en mí, es imposible ) cosa que obviamente no hice. cuando terminó de retarme y explicarme las cosas muy Wandísticamente, culminó con la frase: Que sea la última vez que trates de razonar conmigo; si querías que te digan lo que querías escuchar, hubieras ido a otro lado. Y así sin nada más, la voz ronca se fue y me dejó sola para que "piense", para que "intente entenderme", yo que se para que carajo me molestó, me retó, me confundió y de fugó. Pero conociendo a esa voz... lo más probable es que haya sido para joderme un rato, porque yo esta vez no hice nada, no hice ninguna guachada, tomé la sopa, me porté bien con mamá, hice las tareas, todo! En fin, lo que creo es que la voz ( que OH CASUALIDAD se parecía mucho a la mía ¬¬) intentaba decirme un par de cosas bastante sencillas, como por ejemplo que POR FAVOR dejara de echarle la culpa a mi suerte de cualquier cosa que pasa en my life, que si yo tenía algo perturbando mi cabeza y no podía recordar ni mi nombre, la suerte, pobre infeliz, no tenía nada que ver; además me pidió por favor que dejara de hacer laburar a las neuronas porque después piden aumento y quién las aguanta!? ; también la cara rota me intentó explicar por qué las personas como yo somos como somos, pensamos y sentimos de la forma rebuscada en que pensamos y sentimos, pero como la Erica Purra que soy, JUSTO ahí me perdí y no escuché más; a partir de ese momento lo único que me acuerdo es haber estado escuchando un ritmo pegadizo y super agradable que todavía trato de descifrar pero piensopienso y pienso y menos me acuerdo, menos lo entiendo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario